El mensaje no es «vivir más años«, sino «envejecer mejor«. Investigaciones a nivel mundial siguen estableciendo una relación entre resveratrol y sirtuinas. A través de la acción de estas proteínas –enzimas–, se regulan procesos implicados en la diabetes, la neurodegeneración –Parkinson, Alzheimer–, el tono vascular, tumorogénesis, es decir, están implicadas en procesos que se van desajustando con la edad y que nos llevan a una mayor aparición de enfermedades.

Entre todos los complementos alimentarios que existen en el mercado, hay uno de mi elección que tomo desde hace varios años. Se trata de REVIDOX.

El Dr. Juan Carlos Espín, científico del CSID –Consejo Superior de Investigaciones Científicas–, sometió a la uva a la radiación ultravioleta consiguiendo un extracto especialmente rico en resveratrol llamado STILVID que pudo ser patentado.

El STILVID posee una potente acción antioxidante y antiinflamatoria. No me refiero a una inflamación aguda, como un flemón, sino a la inflamación crónica de bajo grado que aparece de forma gradual, persiste y degrada muchos procesos biológicos que, de ese modo, pueden llevar a graves enfermedades. Por tanto, es mucho más que un antioxidante. Y es que para antioxidante ya tenemos a la vitamina C.

Se han hecho numerosos ensayos clínicos tanto en animales como en humanos con REVIDOX –cuyo componente más destacado es el STILVID– que confirman estos beneficios.

También se realizó con uva sola y resveratrol aislados y se pudo comprobar que no son capaces de ejercer los efectos beneficiosos que resultan de la combinación específica que lleva el REVIDOX. Los resultados demostraron que el resveratrol por sí solo tiene propiedades antioxidantes discretas, sin embargo, dentro de la formulación específica de STILVID, se consiguen efectos anti-aterogénicos que no pueden explicarse ni con la uva ni con el resveratrol por separado y que, además, es capaz de disminuir el estrés oxidativo y la arteriosclerosis asociados a la edad. Así quedó demostrado en los ensayos humanos que el consumo de este complemento, incluso en pacientes polimedicamentados, podría ser una ayuda en el tratamiento para la prevención de riesgo cardiovascular.

Por otro lado, altas dosis de resveratrol, mayores de las que lleva REVIDOX, no está justificada. No ha sido estudiada, no se sabe si dará más beneficios o dará efectos secundarios, así que: precaución.

El resto de productos que comercializan resveratrol no proviene de la uva, sino de una planta China que tiene otros constituyentes, entre ellos laxantes –antraquinonas–.

Otra modalidad también muy común es la de ofrecer «resveratrol de uva…” pero cuando se analiza, se observa la ausencia de este resveratrol ya que su contenido en la uva es mínimo en condiciones normales. En una pastilla de REVIDOX hay tanto resveratrol como en 45 botellas de vino tinto –recordemos que al exponer a la uva a una luz ultravioleta, para defenderse de la agresión, esta produce un aumento muy importante del resveratrol presente en la uva en condiciones normales y que, al ser una patente, ningún otro laboratorio lo puede obtener igual–.

Los otros efectos

Durante los ensayos humanos, los cardiólogos preguntaron a los pacientes cómo se sentían. Llama la atención que, dentro de lo que sería el grupo REVIDOX, recogieron testimonios como «me encuentro más despierto, más activo» o «me concentro mejor«. Otras declaraciones apuntaban hacia una «mejor visión» y una «menor sequedad en la piel«.

Uno de los cardiólogos, al final del ensayo y conocedor finalmente de cuál era el grupo REVIDOX, lo empezó a tomar una temporada y comentaba: «llegaba a la noche menos cansado y me apetecía seguir leyendo más horas«. Así que los propios cardiólogos ¡también empezaron a consumirlo!

Otro efecto inesperado es su potencial para mejorar la libido, así como la cantidad y calidad del esperma, según un estudio realizado en roedores. Además de STILVID, REVIDOX lleva en su composición extracto seco de granada –punicalaginas– y selenio.

Hay que mencionar que acaba de salir el mercado REVIDOX ADN, al que le han añadido vitamina C y cromo para aumentar su poder antioxidante.

Si queréis saber más sobre este tratamiento os recomiendo que leáis el libro REVIDOX confidencial de Juan Carlos Espín, visitéis la web Centro Revidox o los diferentes vídeos que hay en YouTube de entrevistas a J. C. Espín.

No podíamos acabar este post sin comentar lo orgullosos que nos sentimos porque este logro científico es español.

 

Esther Fatou.
Farmacéutica titular